Información y Asesoramiento
El servicio de trabajo social se centra en informar al usuario y a su familia sobre la Ley de Dependencia en Castilla La Mancha, de la valoración y de presentar el abanico de recursos existentes y concretar el más adecuado dependiendo de las circunstancias y la situación que se presente. El trabajo social, según define la Asociación Internacional de Escuelas de Trabajo Social, es la disciplina que promueve el cambio y la cohesión social, la inclusión y la liberación de las personas.
Entre las funciones del asistente social se encuentra la atención totalmente personalizada. Por otro lado, uno de los cometidos de la figura de trabajador social es el seguimiento familiar, la acogida e inserción social del residente y el apoyo emocional a ambos en el proceso del ingreso en el centro.
Las herramientas principales de un trabajador social son la escucha activa, la empatía y la proximidad. A través de ellas los asistentes sociales consiguen conectar con los residentes y recopilar datos que, junto con el resto de información proporcionada por el equipo interdisciplinar del centro, ayudan a tratar a las personas mayores de una manera íntegra y global, garantizando así el mayor bienestar posible y calidad de vida para el residente.
Una persona puede ingresar en un centro residencial por muchos motivos, pero principalmente lo hacen por una situación de dependencia que impide que permanezca en su domicilio. Las trabajadoras sociales son la puerta de entrada a esa institucionalización y tanto para ellos como para sus familiares, contar con una figura de referencia que los escuche y resuelva sus dudas sobre este proceso, ayuda a reducir el nivel de ansiedad y la preocupación que generalmente les provoca.
